Al Washington Post, Ángel Carromero le habló de perseguidores que sólo él ha visto a bordo de “un viejo lada rojo” (was an old, red Lada) y ahora le cuenta a El Mundo sobre “un vehículo azul”. ¿En qué quedamos, Carromero? Una cosa es no saber conducir y otra bien distinta no conocer los colores.
El diario madrileño ELMUNDO.es en su cobertura del caso de Carromero publicaba en agosto de 2012: “con datos de la Dirección General de Tráfico, Carromero ha acumulado un total de 42 multas de tráfico desde 2009, tres de ellas por exceso de velocidad, por las que ha tenido que abonar en total 3.700 euros.(…) por lo que cuando viajó a Cuba, lo hizo sin ningún punto en su licencia de conducción.
Lincoln Díaz-Balart se vanagloria de haber logrado codificar La Guerra Económica contra el pueblo cubano, diseñadas por la CIA y aprobadas en 1962 por el presidente JF Kennedy, bajo la conocida Operación Magosta, en la que se define como tarea principal desarrollar “una guerra económica que induzca al régimen comunista a fracasar en su esfuerzo por satisfacer las necesidades del país”.
Antonio Rodiles, golden boy de la CIA en La Habana pretende revitalizar Estado de Sats, espacio que no ha logrado ser el catalizador de los cambios en Cuba, para los que fue diseñado desde EE.UU.
El odio que ciertos cubanos que viven en Miami tienen en contra de todo lo que huela a Cuba es, además de enfermizo, totalmente irracional. Odian todo lo que venga de la isla y todo lo que sucede en la misma. Lo único que les interesa de allá es lo que dicen o hacen sus compinches, mercenarios y carnavalescos, que viven de las mesadas que estos les envían desde acá.
Yoani Sánchez nos ha acostumbrado a las distintas adaptaciones de su discurso según el público que la esté escuchando, por eso del inicio hasta el final de su recién conlcuida gira internacional su opinión sobre distintos temas fue variando ostensiblemente.
La disidencia cubana está cada día más fragmentada y enfrentada. Pareciera que el destino se ensaña en hacerla fracasar. Pero la causa de ello está en su propia esencia al ser una oposición fabricada, dirigida y financiada por los Estados Unidos. Y como dice un conocido refrán: “Árbol que nace torcido su tronco jamás endereza”.
En los últimos meses se han reportado las giras por EE.UU, España y otros países de varios opositores cubanos que cambiando de posiciones que tuvieron antaño se alinean con la política ilegal, inmoral y contraproducente de embargo contra su país.
No es secreto que anualmente la Casa Blanca aprueba no menos de 20 millones de dólares para pagar a la contrarrevolución cubana radicada en Miami y en la Habana y además destina otros fondos empleados por la NED, la USAID y la CIA, para ejecutar programas de acción encubierta, con el propósito de derrocar al gobierno socialista.
A pesar de su prontuario Ángel Carromero, que se mantiene como asesor y cobra 50.000 euros anuales tras regresar de Cuba después de cuatro meses en la cárcel y dos disidentes fallecidos accidentalmente en el coche que él conducía, está aspirando a la jefatura de las juventudes franquistas.