País

Descubren a la Yoani real detrás de la máscara de pobre víctima

La gira de la bloguera viajera está dejando más pérdidas que ganancias. El personaje de Anita, la huerfanita no ha logrado calar en las audiencias. Por el contrario, después que sus interlocutores la escuchan, esto es lo que piensan: “hoy me parece una siniestra negociante, una avispada mercachifle de la libertad, una pseudoactivista endiosada por su injustificable fama”

El colmo del Camaján

El Camaján y el criminal de las Azores. Foto: Isla mía

Mientras los políticos españoles no saben por dónde van a salir con la inestabilidad social, Elizardo Sánchez, el Camaján, ha dicho que los mismos “prometieron actuar para impedir acciones perjudiciales para el pueblo de Cuba” mientras abandonan a los suyos, y ha añadido que ve “crucial” el “apoyo pluripartidista” a la defensa de derechos y libertades en Cuba. ¿Quién tendrá la cara más dura?

Todas las rutas del dinero llevan a Yoani Sánchez (+ Infografía)

El gobierno de los EE.UU. ha creado un complejo entramado para abastecer con dinero, recursos tecnológicos y otros materiales a sus asalariados en Cuba como Yoani Sánchez, las Damas de Blanco y demás opositores. Para lograr hacer esto se apoyan en agencias e instituciones norteamericanas las cuales son encargadas de hacer llegar estos recursos a los supuestos disidentes cubanos.

Si hubiese ocurrido en Cuba (+ Video)

Familia cubana desalojada por la policía en España.

Los grandes medios de comunicación del estado español adoptan una posición demasiado cercana a la peor prensa de Miami para hablar sobre Cuba, mientras que para hablar de los problemas de la “casa” hacen malabares, inventan eufemismos, lo que provoca a una percepción muy crítica con ese tratamiento.

Yoani Sánchez a la alemana (+ Fotos)

Para cada país que visita Yoani Sánchez tiene su receta de repostería: un recuerdo familiar, algunas frases manidas y mucho melodrama, esos son los principales ingredientes de sus intervenciones. Con dicha fórmula ha pretendido convencer a sus oyentes, algunos le creen, otros sencillamente se ríen de sus desatinos.